ALONSO SALAZAR J.
No nacimos pa’ semilla. La cultura de las bandas juveniles en Medellín
Bogotá: Centro de Investigación y Educación Popular (CINEP), 5ª
edición, 1991
"Yo pregunto sobre su tumba cavada en la montaña:
¿No habrá manera de que Colombia, en vez de matar a sus
hijos, los haga dignos de vivir?.
Si Colombia no puede responder a esta pregunta, entonces
profetizo una desgracia:
Desquite resucitará, y la tierra se volverá a regar de
sangre, dolor y lágrimas".
Gonzalo Arango. Elegía
a Desquite. Obra negra
Publicar este texto sobre los jóvenes de Medellín que matan es un
deber de CINEP con la vida en Colombia.
Cuando lo más importante se ha banalizado, puesto en el mercado,
destruido, la tarea de colaborar en la construcción comienza por hacer el
diagnóstico. Para esto hay que adentrarse en las motivaciones y la lógica de
los jóvenes que pasan matando. Leer su racionalidad y su moral como una
legitimación de la enfermedad es ser incapaz de darse cuenta que el problema
hay que plantearlo desde dentro para poder superarlo. El texto es el primero de
una serie. Vendrán otros con interpretaciones y alternativas de construcción.
No podemos los colombianos seguir ocultándonos que hay un espacio en
todos nosotros donde está en quiebre la base de toda ética capaz de estructurar
una sociedad de convivencia para todos: el valor prioritario de la vida. Para
los creyentes el inmediato sacramento del sentido, en la frase del Padre de la Iglesia:
"La gloria de Dios es el ser humano viviente"
Este libro nos invita a mirar el síntoma de un largo proceso de
desarraigo familiar y social que levanta interrogantes a toda Colombia desde,
el corazón de la cultura antioqueña empresarial, colonizadora, católica,
abierta angustiosamente a la modernidad y al consumismo desde la pobreza
marginal de los barrios, entre el amor y el poder, la ambición y la nobleza, la
religión y la familia, la guerrilla, la policía y el narcotráfico.
La Corporación Región de Medellín comparte con CINEP esta tarea. Por
eso Alonso Salazar se sumergió en las comunas populares para desentrañarles
este texto, siguiendo una intuición originariamente compartida con Silvia
Dussan de Kalmanovitz.
CINEP y la Corporación Región pensamos que los riesgos de presentar
esta verdad incómoda valen la pena si levantan las preguntas pertinentes y
suscitan un compromiso por proteger, dignificar y hacer más viable la vida, de
todos los hombres y las mujeres de Colombia.
PRESENTACIÓN
La violencia es una parte de la realidad de Medellín. Vivimos en una
ciudad en guerra. Una guerra donde intervienen muchos poderes y donde los
protagonistas son los jóvenes. Ellos son los que matan y mueren.
Ejecutantes de un libreto escrito por otras manos e inspirado en el
sentido trágico que sigue marcando nuestra historia.
La nuestra es una guerra donde de nada sirve hablar de buenos y de
malos. El desafío real es encontrar pistas que nos ayuden a salir de este
laberinto donde muchos plomos, disparados desde muchos lados, con innumerables
argumentos, nos están matando.
Las estadísticas no mienten, pero no logran sin embargo decir lo que
pasa en esta ciudad, en nuestra vida, lo que está pasando. Con nuestra manera
de habitar y caminar las calles, de relacionamos con los vecinos y los
transeúntes. Medallo es una berraquera, seguimos diciendo la mayoría de sus
habitantes. Es un infierno, dicen otros, especialmente de afuera. Medellín es
un hervidero de vida y muerte, es una expresión radical de la crisis del país.
Vivimos en una ciudad donde hay muchos muertos y pocos derrotados.
Nuestro compromiso, y el de muchos, es afianzar la vida, y la esperanza. En
esta empresa sobran balas y hacen falta todas las palabras.
Este trabajo presenta la voz propia de algunos de los protagonistas de
la violencia que hoy padecemos. Los relatos fueron elaborados teniendo como
base una serie de entrevistas realizadas en el año 1989 e inicios de 1990. Del
total de entrevistas realizadas en la investigación., seleccionamos las que
creímos más representativas. Hemos tratado de conservar el estilo y el lenguaje
de las narraciones originales. Solo organizarnos los relatos buscando cierta
coherencia y fluidez que facilitan la lectura y la comprensión. Los nombres,
los lugares y algunas circunstancias se han cambiado por razones obvias.
En un capítulo final presentamos algunos elementos de reflexión, que
deben asumirse con el grado de provisíonalidad que da el actual estado de
investigación de este fenómeno.
Este trabajo se realizó en un primer momento con el apoyo del
Instituto Popular de Capacitación, y se terminó con el auspicio de la
Corporación Región.
Quiero agradecer a las personas que de muy diversas formas me
colaboraron. En este trabajo. En especial a Jorge Ignacio Sánchez, Camilo Borrero
y Laura Restrepo, por sus ánimos y su tiempo.
Alonso Salazar
Corporación Región.